cibernoticias EXPRESS

La cara oculta de las noticias

Ante el plan Merkel para Europa: hay que romper con la UE y con el euro

Ante el plan Merkel para Europa: hay que romper con la UE y con el euro
Alemania, haciendo ostentación de su hegemonía, ya no busca sólo imponer sanciones automáticas a los países incumplidores del déficit o dar el visto bueno previo a los presupuestos de los Estados antes de que sus Parlamentos los voten.
Felipe Alegría | Para Kaos en la Red | 27-2-2011
www.kaosenlared.net/noticia/ante-plan-merkel-para-europa-hay-romper-ue-euro

ANTE EL PLAN MERKEL PARA EUROPA: HAY QUE ROMPER CON LA UE Y CON EL EURO

El rebrote de la crisis de la deuda pública portuguesa ha puesto de nuevo sobre la mesa la crisis de la deuda de los países periféricos y, en particular, la del Estado español, del que dicen en Davos que es “la cuestión crítica de Europa”: “demasiado grande para dejarlo caer y demasiado grande para salvarlo”.

Portugal   y el Estado español están   a merced de los “mercados” (o sea, la gran banca europea y los fondos especulativos) y   se encuentran –con distintos ritmos- condenados a un “rescate”.

En un intento de evitarlo o, al menos, de retrasarlo y hacerlo “ordenado”, los gobiernos quieren reforzar el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera, que ahora mismo es incapaz de hacerse cargo de una crisis de pagos como la española.

Pero Merkel,  la “canciller de Europa” a nombre del capitalismo alemán, exige severas contrapartidas a los países periféricos y a toda la zona euro.

El plan Merkel: otra brutal vuelta de tuerca

Alemania, haciendo ostentación de su hegemonía, ya no busca sólo imponer sanciones automáticas a los países incumplidores del déficit o dar el visto bueno previo a los presupuestos de los Estados antes de que sus Parlamentos los voten.

Fija nuevas condiciones draconianas: así , el alargamiento general de la edad de jubilación, la fijación por ley de los límites de déficit y deuda y la exigencia de que los salarios se liguen a la “productividad” y no al IPC, es decir, reducciones salariales y sustitución de las partidas fijas del salario por las variables. O sea, ganar menos y producir más.

Al mismo tiempo, Merkel plantea que, a partir de 2013, ante la suspensión de pagos de un país, también los bancos y fondos acreedores se tendrán que hacer cargo de una parte de las pérdidas (una “quita”).

Y es que, en los tiempos venideros, van a resultar inevitables las suspensiones de pagos de los países “rescatados”, como Grecia, Irlanda y, en su caso, Portugal o el Estado español. Inevitables porque los brutales planes de ajuste provocan paro masivo y recesión, con la consiguiente reducción de los ingresos públicos, mientras los intereses de la deuda se disparan, hasta que ésta ya no se puede devolver.

El verdadero objetivo del capitalismo alemán es retrasar al máximo este momento y asegurar mientras tanto que sus bancos (que tienen comprometidos más de 500.000 millones -el 20% de su PIB- en deuda de los países periféricos) cobren la mayor parte posible de sus préstamos e intereses y queden lo menos tocados.

La necesidad de romper con la Unión Europea y con el euro

La Unión Europea, comandada por la Merkel, se muestra sin careta como la Europa del capital, determinada a imponer un retroceso de décadas en el nivel de vida   de los pueblos.

Zapatero, como súbdito servil, se ha apresurado a respaldar a Merkel, declarándose   “firme defensor” de sus exigencias. Dos días antes, en la visita de la canciller alemana, decía:“Haremos las reformas porque estamos unidos a un proyecto que se llama Unión Europea y Unión Monetaria, que supone que compartimos moneda y destino”.

Pero su destino es la ruina de la clase trabajadora.

Para impedir la catástrofe no hay otro camino que no reconocer la deuda y romper con la UE y con el euro.

Unas medidas que forzosamente deben ir acompañadas de la expropiación de la banca, un rígido control de los movimientos de capitales, la nacionalización de las empresas estratégicas, la escala móvil de horas de trabajo para que trabajen todos y el establecimiento del monopolio de comercio exterior, con plena consciencia de que los problemas no tienen solución aislados sino junto a toda la clase trabajadora europea, en el avance hacia unos Estados Unidos Socialistas de Europa.

Artículo publicado en Página Roja nº 2, periódico mensual de Corriente  Roja.

28 febrero, 2011 - Posted by | ARTÍCULOS de OPINIÓN, ECONOMIA | , ,

No hay comentarios aún.

Deja un comentario